Si uno se fija únicamente en lo que Jesús es para uno,
no habrá duda que nuestro espíritu sabrá hacer y reconocer que sin la ayuda de
la oración y de una humildad profunda, solo con mirar al Sagrario, veremos que
Jesús nos transformará.
Como decía el Beato Manuel González de Jesús: Si la
con que me miras, como esperando verme salir por ello (la puerta del Sagrario)
para hablar y andar contigo, de esa manera, al sentir esa emoción en nosotros
mismos, nos tenía que llenar de empuje y valentía, para pregonar: Dios nos ama,
está a nuestro lado en cada instante y siempre.
Por eso decía también San Pedro: ¿A quién vamos a ir?,
Tú tienes palabras de vida eterna. Porque estando contigo, que toseríamos si
mirásemos atrás.
¡Es tan importante humillarse delante de Él..!, es
decir, en oración a solas con Jesús, estemos atentos, en silencio y
recogimiento. Jesús nos mostrará la verdad, pero todo se tiene que ver con Fe y
humildad, somos hermanos, eso no tiene que acobardarnos, Jesús está ahí, todo
lo demás se nos dará por añadidura.
Forma para hacerlo: Lo que está a tu alcance, lo que
dependa de Señor nos dice, que somos conscientes de lo que vamos a hacer,
tendríamos que preocupamos de los modos que debíamos hacer la oración.
Hay que prepararse para ponernos delante de Ntro. Dios
siendo dóciles, sencillos, constantes y veremos como Jesús nos cogerá de la
mano y su ayuda será para reconocer aquello que vamos a decirle y mucho más la
Stma. Virgen que es nuestra Madre viene con nosotros. De este modo confiaremos
cada vez más en la Oración, veremos que todo será más fácil y que sin Jesús,
nuestra oración jamás será fructífera.
Delante de la Oración.
¿Qué fue lo que más nos llama la atención?. Si vamos
con el pensamiento puesto en lo que vamos hacer, tenemos que ver que estamos en
la presencia de de un Dios bueno, paciente, que olvida lo que hay feo en
nuestro vivir, de seguro se quitará todo temor. Si es lo contrario, volveremos
a hacer el payaso, ¿por qué?, por falta de fe, amor y buena voluntad.
El resultado de la Oración.
¿Qué sentimientos hemos experimentado? Si el pensamiento
mira para atrás, haciendo lo que tú no apruebas, vemos que sin humildad la
valentía retrocederá y la fortaleza no tendrá fuerza. No miremos atrás, que solo
tu amor, Señor, nos ayudará. Sonreirás y tus brazos se posaran en nosotros,
porque siempre serás nuestro apoyo
MARIA ALBACETE
Adoradora de la Sección de Torreperogil